Sobre una tabla se puede hacer más que surfear

Si te atrae la idea de subirte sobre una tabla y hacer equilibrios sobre el agua pero no te imaginas surfeando sobre las olas, no te preocupes. Hay otros tipos de tablas y otras actividades más tranquilas y que seguro que te gustarán más para realizar en el mar.

Mantener el equilibrio sobre una tabla en un mar en calma es relativamente sencillo. Dependiendo de la pericia de cada uno es fácil lograrlo en muy pocos intentos, aunque el estilo no sea tan elegante como gustaría de principio.

Contar con un remo puede ayudar a mantener el equilibrio. No es que realmente te estés “apoyando” en nada, pero la sensación es como si así fuera y con el suave movimiento que se realiza al desplazar el agua resulta más sencillo aguantarse en pie sobre la tabla.

Una tabla de paddle surf

Por supuesto, estamos hablando del paddle surf, una divertida actividad que se realiza sobre una tabla y que consiste en mantenerse de pie sobre ella y, con un largo remo, deslizarse cobre un mar en calma y disfrutar del paisaje que ofrecen las aguas transparentes de Ibiza.

Esta actividad es apta para todas las edades y resulta perfecta para personas que quieren hacer algo tranquilo, para disfrutar de la naturaleza, pero sin demasiada adrenalina.

También encaja muy bien dentro de una tarde de actividades frenéticas, como un pequeño descanso entre el vertiginoso ritmo de los arrastrables y la descarga de energía que supone conducir una moto de agua, por poner un ejemplo.

El paddle surf puede ayudar a recuperar el aliento y, de paso, comprobar lo bien que se puede ver el fondo marino en esta maravillosa isla, disfrutando quizás de la compañía de algunos peces que naden alrededor de donde se está realizando la actividad.

¿Te apetece probar el paddle surf?

Es una actividad perfecta para realizar en grupo, especialmente en familia, ya que con ella podrán disfrutar por igual los mayores y los más jóvenes. Todos podrán ir más o menos al mismo ritmo y pasarlo bien juntos.

Quizás nos sorprenda la naturalidad y facilidad con la que los niños pueden aprender a guardar el equilibrio sobre la tabla y lo bien que se manejan en muy poco tiempo. Seguramente antes que algunos adultos, especialmente si no se ha realizado nunca ningún deporte marítimo sobre tabla. En cualquier caso, siempre será una experiencia gratificante, totalmente garantizada.